23 de enero de 2016

Respira, piensa y actúa

¡Hola a todos!

Esta semana desde nuestro proyecto de educación asistida con perros queremos presentaros a los personajes que nos acompañarán a lo largo de las dieciséis sesiones de duración que contemplamos en su planificación y diseño.

En primer lugar queremos presentaros al monstruo azul (nuestro protagonista) y a su amigo el monstruo rojo.




 Nuestro amigo tiene una familia formada por su papá, su mamá y su hermana.



Y también va al cole. Así que esta es su maestra.


Ellos son los encargados de escenificar las situaciones que suponen un conflicto emocional para nuestro protagonista azul y, que con ayuda de Neska, ayudamos a resolver cada semana.
Los ha caracterizado Tere, la abuela de uno de los niños participantes en el proyecto y, desde aquí, queremos darle las gracias porque, además, han quedado chulísimos.

Y ahora, vamos a pasar a contaros cómo ha sido la sesión de esta semana.

De nuevo, Neska llegó al colegio con muchas ganas de trabajar y, como nosotros ya estábamos todos preparados, salimos a buscarla y a conducirla a clase.


Una vez dentro, todos la saludábamos con nuestra voz o con ayuda del Super Talker. Le decimos "Hola Neska" y ella se acerca muy contenta hacia nosotros para que la acariciemos.




Después le pedimos que nos traiga a nuestro monstruo azul favorito.



Para poder comenzar a contar el cuento con ayuda de nuestras maestras.






Cada cuento lo trabajamos durante tres semanas. De este modo lo vamos aprendiendo y cada semana colaboramos más activamente en contarlo.
De nuevo, nuestro monstruo se encontraba frustrado y enfadado porque quería ponerse sus dos zapatos a la vez y no lo conseguía.
¡Teníamos que ayudarle!
Y lo primero era calmarlo. Para ello pedimos a Neska que nos trajera los números. De este modo le enseñábamos a contar mientras le acariciábamos la tripita y respirábamos.







Una vez calmado, teníamos que pensar un plan. Necesitábamos nuestro sombrero mágico de pensar, así que se lo pedimos a Neska.


Con ayuda del sombrero, pensamos varios planes. El monstruo podía fijarse en cómo se ponía los zapatos su hermana, podía ponerse primero un zapato y luego otro o podía pedirle ayuda a su mamá.
Cada plan lo colocábamos en una alfombra de color y le pedimos a Neska que se sentase en una de ellas.


Esta semana resolvíamos el conflicto de nuestro amigo de distinta forma. Esto nos sirve para trabajar la flexibilidad de pensamiento y aprender que un mismo problema puede tener soluciones diferentes. Neska se sentó en la alfombra que señalaba que nuestro amigo debía resolver su problema poniéndose primero una zapatilla y después la otra. ¡Así que le ayudamos a ello!




Lo había conseguido. ¡Ahora ya estaba contento!


Como siempre, ofrecimos agua a Neska.


Y después nos lavamos las manos y valoramos con ayuda de nuestras maestras cómo nos habíamos comportado.




Y, por último, nos despedimos de Neska, Jesús y Pepa hasta la próxima semana.



Por la tarde, seguimos trabajando en nuestras aulas. Recordamos el cuento con ayuda del iPad y la PDI y trabajamos la secuencia temporal y la asociación de pictogramas de emociones a una viñeta del monstruo. 






No hay comentarios:

Publicar un comentario