Esta vez nos fuimos a Bulgaria, donde nos presentó a dos nuevos amigos: Steliyan e Irina. Llevaban unos trajes muy bonitos que nos los habían traído de allí, y nos explicaron cosas interesantísimas.
Por ejemplo, probamos algunas comidas típicas, como el Tarator, que se hace con pepino y yogur.
Nos contaron algunas de sus tradiciones, como por ejemplo, para semana santa que pintan huevos y juegan a un juego llamado "Chukanes Yaitsá".
También nos dijeron que tienen un alfabeto un poco diferente al nuestro, por eso a nosotros nos parece que escriben un poco raro.
Y además, ¿A que no sabéis cómo dicen sí y no los búlgaros? Pues para decir que sí, mueven la cabeza de un lado a otro, y para decir que no, la mueven de arriba a abajo. Vamos, al revés que nosotros. ¡Menudo lío!
Ahora Bulgaria... venga a darnos ideas para estas vacaciones.
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